El concepto de “regulación vigente”
Para comprender esto mejor, retrocedamos a julio de 2023 para contextualizar. En ese momento, la SEC ordenó a Coinbase dejar de operar con todas las criptomonedas de su cartera, excepto Bitcoin, argumentando que estos activos se consideraban valores.
En términos simples, la SEC afirmó que estos activos estaban bajo su jurisdicción, obligando a Coinbase a cumplir con sus reglas.
Es fácil imaginar las repercusiones si Coinbase hubiera acordado retirar más de 200 de sus tokens criptográficos de la lista. Esto probablemente habría significado el fin del comercio de criptomonedas en EE. UU. tal como lo conocemos. En cambio, Coinbase optó por recurrir a los tribunales para obtener una resolución legal más clara.
¿Una continuación del status quo?
Avanzando rápidamente hasta diciembre, poco ha cambiado. Coinbase propuso otra revisión de las normas de la SEC sobre el comercio de criptomonedas, pero la propuesta fue en gran medida ineficaz. El presidente de la SEC, Gary Gensler, expuso tres razones principales para rechazar esta solicitud:
1. Las leyes de valores existentes ya rigen el mercado de criptomonedas.
2. La SEC ya supervisa muchas operaciones de criptomonedas en todo Estados Unidos.
3. La SEC tiene autoridad exclusiva para definir sus propios procedimientos de elaboración de normas.
Gensler también hizo referencia a un caso de 1946 (SEC v. WJ Howey Co.), que, sin entrar en detalles, otorgó mayor flexibilidad a los contratos de inversión. En esencia, esta decisión permitió que los acuerdos de inversión se adaptaran a diversas situaciones en lugar de permanecer fijos.
La SEC parece estar aplicando esta decisión a los mercados de criptomonedas, alegando que se aplica la misma supervisión flexible. En otras palabras, las leyes federales de valores son relevantes para empresas como Coinbase.
Posibles respuestas de Coinbase
Por el momento, parece que la pelota ha vuelto a estar en la cancha de Coinbase. Es crucial recordar que la SEC ya ha fallado en contra de Coinbase, en particular en litigios que acusaban a la compañía de operar como una plataforma de intercambio no registrada.